Les compartimos algunas cartas de amor reales para ellas y ellos, estas cartas de amor son ideales para dedicar a tu novio o novia. cuando envías una carta romántica de amor a tu pareja expresas el gran amor que sientes por esa persona.
Comentamos: ¿Cuál es tu carta favorita?
Querida /o mía /o,
Decirte que te amo se me queda pequeño, alguien debería inventar nuevas palabras para definir mis sentimientos de entrega, de devoción, de admiración, de necesitarte cada segundo. Eso siento y más. Te digo que te amo, pero ya lo sabes, quizás de tanto repetírtelo se desvirtúan las palabras, pero no, cada vez que te lo digo es porque mi amor por ti ha aumentado.
Quiero que lo sepas, no te amo en pasado, no te amo en presente, ni te amo en futuro, es un amor sin tiempo, tampoco tiene distancias, es simplemente amor puro, cargado de ilusiones, lleno de promesas que no deben cumplirse porque ya se cumplieron todas al conocerte.
Te amo, como dos palabras que forman una sonrisa en tus labios, como dos cielos llenos de colores reflejados en tus ojos, como dos palabras infinitas que no deben dejar de sentirse.
Amarte en realidad es un premio, desconozco si te merezco, al menos lucho por merecerte, pero es un premio, es un regalo que cualquier persona debería recibir, pero que sólo tengo yo.
Por dejarme amarte te doy las gracias y te ofrezco mil años de amor que condenso en este beso que te entrego desde el fondo de mi mismo.
Te amo
Carta 2: Te oigo
Querida / o mía / o:
Son ya mil momentos de amor los que hemos compartido, son mil instantes juntos y muchas palabras en las que nos hemos dicho con música de amor lo que sentimos. Quizás jamás dejemos de decirnos lo que nos queremos, lo que nos amamos, lo que esperamos, el amor es así: nunca aparece el cansancio, nunca dejamos de producir magia con sentimientos.
Y yo quiero que siga así, porque con cada palabra, con cada sílaba, con cada sonido que sale de tus labios me estremezco, y aunque ya conozca tu voz (¿cómo no conocerla si es lo único que quiero oír?) cada vez que te escucho vuelvo a temblar y me vuelvo a enamorar de ti, una y cien veces.
Cuando no estás te oigo, cuando estás te admiro, cuando no estás te siento, cuando estás te quiero abrazar. Recítame tus pensamientos, tus esperanzas, lo que esperas de mi, lo que sueñas, procuraré meterme en tus sueños y en tus pensamientos, cumplir tus esperanzas y estar ahí cada instante.
Te quiero seguir oyendo, sumando los sonidos, guardando tus palabras en mis sentimientos, obedeciendo con amor tus anhelos. Te quiero seguir escuchando, cuando lo hago olvido el mundo, olvido mis penas, olvido hasta el olvido.
Me despido de ti, no sin decirte que ahora no te oigo, pero miento, grabé tus palabras diciéndome que me amas y por eso la sonrisa se quedó perenne en mi. Deseo que llegue el momento de volvértelo a escuchar, porque tus te amo son mi fuerza de vivir.
Te oigo, te amo.
Carta 3: Que alegría!
Querida / o mía / o,
Siento alegría por saber que me quieres, la vida es distinta y el aire tiene aroma de sonrisas. Siento alegría por tenerte, la misma que siento porque te pertenezco.
Cada beso es un sueño y cada una de tus miradas es el cielo por el que camino sin fin. Que alegría tengo cuando amanezco pensando que te veré, que alegría cuando anochezco esperando despertar para volver a verte. Siempre es alegría, tu eres alegría.
Y es que el mundo es alegre, hasta la tristeza es alegre si tu me acompañas, si tu estás conmigo. Porque el amor es alegre, es dicha y tu eres el centro de cualquier felicidad.
El mundo me ve alegre, y yo no disimulo la alegría, es difícil ocultar el amor, y es imposible no cuando se trata amarte a ti. Eres lo mejor, ¿cómo no alegrarme?.
De nuevo hoy me acostaré con alegría, me dormiré con tu imagen en mi mente, sé que me amas y con eso durará mi alegría.
Que alegría!
Carta 4: Te miro
Querida / o mía / o,
Te miro y veo ternura, me haces recordar lo que es la dulzura, lo que es la belleza. Te miro y me quedo paralizado en el espejo de tu mirada.. Te miro y gozo al mirarte.
Sé que no dejo de mirarte, que incluso me excedo en mirarte. Pero tu sabes que te amo, que todo es admiración, y que a la vez te miro para darte gracias.
Te miro con incredulidad porque a veces pienso que no te merezco, pero sabes que lucho cada día por conseguirlo.
Te amo, y al mirarte el amor aumenta, te quiero, y no puedo dejar de mirarte.
Si me algún día me prohíbes mirarte firmarás mi tristeza, porque mirarte es mi sueño y incluso mirarte es mi religión.
Mirarte, ¿cómo no mirarte?, si poder mirarte es un sueño cumplido, si mirarte es agradecerte, si mirarte es seguir soñando.
Te miro, y con esto sabrás que cuando te miro te digo que te amo con la mirada, te digo gracias por corresponderme y me despido hasta la nueva mirada ... que no tardará más de un segundo.
Te miro y jamás dejaré de mirarte mientras viva.
Carta 5: Es largo el camino
Querida / o mía / o,
Es largo el camino del amor, pero corto si tu me das la mano. Son pasos de tierra y de tropiezos, cuando me caiga sé que tu estarás para levantarme.
Tendré cuidado, estaré a tu lado, seguiré tu andar muy cerca de ti. Seguramente me equivocaré, ten paciencia si elijo un camino erróneo, esperaré tu perdón.
No me dejes andar sólo, sin ti perderé el amor, me quedará como guía la tristeza que nublará mis ojos de lágrimas. No me dejes sólo, me equivocaré de camino y no hallaré la felicidad.
A tu lado puedo sonreír y tener como amiga a la ternura, a tu lado puedo soñar con ser feliz, y despertar y ser feliz. A tu lado caminaré, a tu lado te amaré.
Es largo el camino, pero más largo sería sin ti. Porque un día te encontré y supe desde entonces que convertirías en el principio y en el fin, y que cada paso por andar me acercaría a ti.. a tu amor.
Carta 6: Dime que sí
Querida / o mía / o,
Dime que sí y así me harás nacer, dime sí a mi amor, dime sí a mis sueños ... dime sí a hacerme feliz.
No hacen falta preguntas, ni siquiera respuestas, basta una mirada seguida de un beso que significa sí, sí al amor y sí a mil sentimientos.
Yo también te digo que sí, a respetarnos, a confiarnos, a sentirnos, a escucharnos, a comprendernos, a esperarnos, a hablarnos.. a amarnos.
Con un alma como regalo y el mundo como testigo te pido un sí, y me arrodillo ante ti, con mi escuchar pendiente de ti, con mis sentidos entregados a tu voluntad, con mi vida en tus manos, escucho tu sí.
Y no sabes que diciéndome que sí me haces feliz, si lo supieras me lo dirías, porque no hay nada más que tu amor, no hay más que tu sí al amor.
Dime que sí, escucha mis ruegos, mis promesas, mis verdades, mi entrega ... mi vida.
¿Me amas? ... dime que sí
Carta 7: Gracias
Querida / o mía / o,
Gracias por existir, gracias.
Gracias por fijarte en mi, por dejarme disfrutar de tu presencia, por mirarme y por hablarme.
Gracias por dejarme soñar contigo, por hacerme vivir de ti, por provocar la ilusión que lleva tu nombre.
Gracias por elegirme, elegirme para acompañarte, elegirme para caminar juntos por la vida, elegirme para sentir.
Gracias por respirar, andar, mirar, hablar, despertar, sonreír, escuchar.... gracias por existir.
Gracias y un millón de gracias por dejarme amarte.
Gracias
Carta 1: Te amo
Querida /o mía /o,
Decirte que te amo se me queda pequeño, alguien debería inventar nuevas palabras para definir mis sentimientos de entrega, de devoción, de admiración, de necesitarte cada segundo. Eso siento y más. Te digo que te amo, pero ya lo sabes, quizás de tanto repetírtelo se desvirtúan las palabras, pero no, cada vez que te lo digo es porque mi amor por ti ha aumentado.
Quiero que lo sepas, no te amo en pasado, no te amo en presente, ni te amo en futuro, es un amor sin tiempo, tampoco tiene distancias, es simplemente amor puro, cargado de ilusiones, lleno de promesas que no deben cumplirse porque ya se cumplieron todas al conocerte.
Te amo, como dos palabras que forman una sonrisa en tus labios, como dos cielos llenos de colores reflejados en tus ojos, como dos palabras infinitas que no deben dejar de sentirse.
Amarte en realidad es un premio, desconozco si te merezco, al menos lucho por merecerte, pero es un premio, es un regalo que cualquier persona debería recibir, pero que sólo tengo yo.
Por dejarme amarte te doy las gracias y te ofrezco mil años de amor que condenso en este beso que te entrego desde el fondo de mi mismo.
Te amo
Querida / o mía / o:
Son ya mil momentos de amor los que hemos compartido, son mil instantes juntos y muchas palabras en las que nos hemos dicho con música de amor lo que sentimos. Quizás jamás dejemos de decirnos lo que nos queremos, lo que nos amamos, lo que esperamos, el amor es así: nunca aparece el cansancio, nunca dejamos de producir magia con sentimientos.
Y yo quiero que siga así, porque con cada palabra, con cada sílaba, con cada sonido que sale de tus labios me estremezco, y aunque ya conozca tu voz (¿cómo no conocerla si es lo único que quiero oír?) cada vez que te escucho vuelvo a temblar y me vuelvo a enamorar de ti, una y cien veces.
Cuando no estás te oigo, cuando estás te admiro, cuando no estás te siento, cuando estás te quiero abrazar. Recítame tus pensamientos, tus esperanzas, lo que esperas de mi, lo que sueñas, procuraré meterme en tus sueños y en tus pensamientos, cumplir tus esperanzas y estar ahí cada instante.
Te quiero seguir oyendo, sumando los sonidos, guardando tus palabras en mis sentimientos, obedeciendo con amor tus anhelos. Te quiero seguir escuchando, cuando lo hago olvido el mundo, olvido mis penas, olvido hasta el olvido.
Me despido de ti, no sin decirte que ahora no te oigo, pero miento, grabé tus palabras diciéndome que me amas y por eso la sonrisa se quedó perenne en mi. Deseo que llegue el momento de volvértelo a escuchar, porque tus te amo son mi fuerza de vivir.
Te oigo, te amo.
Carta 3: Que alegría!
Querida / o mía / o,
Siento alegría por saber que me quieres, la vida es distinta y el aire tiene aroma de sonrisas. Siento alegría por tenerte, la misma que siento porque te pertenezco.
Cada beso es un sueño y cada una de tus miradas es el cielo por el que camino sin fin. Que alegría tengo cuando amanezco pensando que te veré, que alegría cuando anochezco esperando despertar para volver a verte. Siempre es alegría, tu eres alegría.
Y es que el mundo es alegre, hasta la tristeza es alegre si tu me acompañas, si tu estás conmigo. Porque el amor es alegre, es dicha y tu eres el centro de cualquier felicidad.
El mundo me ve alegre, y yo no disimulo la alegría, es difícil ocultar el amor, y es imposible no cuando se trata amarte a ti. Eres lo mejor, ¿cómo no alegrarme?.
De nuevo hoy me acostaré con alegría, me dormiré con tu imagen en mi mente, sé que me amas y con eso durará mi alegría.
Que alegría!
Querida / o mía / o,
Te miro y veo ternura, me haces recordar lo que es la dulzura, lo que es la belleza. Te miro y me quedo paralizado en el espejo de tu mirada.. Te miro y gozo al mirarte.
Sé que no dejo de mirarte, que incluso me excedo en mirarte. Pero tu sabes que te amo, que todo es admiración, y que a la vez te miro para darte gracias.
Te miro con incredulidad porque a veces pienso que no te merezco, pero sabes que lucho cada día por conseguirlo.
Te amo, y al mirarte el amor aumenta, te quiero, y no puedo dejar de mirarte.
Si me algún día me prohíbes mirarte firmarás mi tristeza, porque mirarte es mi sueño y incluso mirarte es mi religión.
Mirarte, ¿cómo no mirarte?, si poder mirarte es un sueño cumplido, si mirarte es agradecerte, si mirarte es seguir soñando.
Te miro, y con esto sabrás que cuando te miro te digo que te amo con la mirada, te digo gracias por corresponderme y me despido hasta la nueva mirada ... que no tardará más de un segundo.
Te miro y jamás dejaré de mirarte mientras viva.
Querida / o mía / o,
Es largo el camino del amor, pero corto si tu me das la mano. Son pasos de tierra y de tropiezos, cuando me caiga sé que tu estarás para levantarme.
Tendré cuidado, estaré a tu lado, seguiré tu andar muy cerca de ti. Seguramente me equivocaré, ten paciencia si elijo un camino erróneo, esperaré tu perdón.
No me dejes andar sólo, sin ti perderé el amor, me quedará como guía la tristeza que nublará mis ojos de lágrimas. No me dejes sólo, me equivocaré de camino y no hallaré la felicidad.
A tu lado puedo sonreír y tener como amiga a la ternura, a tu lado puedo soñar con ser feliz, y despertar y ser feliz. A tu lado caminaré, a tu lado te amaré.
Es largo el camino, pero más largo sería sin ti. Porque un día te encontré y supe desde entonces que convertirías en el principio y en el fin, y que cada paso por andar me acercaría a ti.. a tu amor.
Querida / o mía / o,
Dime que sí y así me harás nacer, dime sí a mi amor, dime sí a mis sueños ... dime sí a hacerme feliz.
No hacen falta preguntas, ni siquiera respuestas, basta una mirada seguida de un beso que significa sí, sí al amor y sí a mil sentimientos.
Yo también te digo que sí, a respetarnos, a confiarnos, a sentirnos, a escucharnos, a comprendernos, a esperarnos, a hablarnos.. a amarnos.
Con un alma como regalo y el mundo como testigo te pido un sí, y me arrodillo ante ti, con mi escuchar pendiente de ti, con mis sentidos entregados a tu voluntad, con mi vida en tus manos, escucho tu sí.
Y no sabes que diciéndome que sí me haces feliz, si lo supieras me lo dirías, porque no hay nada más que tu amor, no hay más que tu sí al amor.
Dime que sí, escucha mis ruegos, mis promesas, mis verdades, mi entrega ... mi vida.
¿Me amas? ... dime que sí
Querida / o mía / o,
Gracias por existir, gracias.
Gracias por fijarte en mi, por dejarme disfrutar de tu presencia, por mirarme y por hablarme.
Gracias por dejarme soñar contigo, por hacerme vivir de ti, por provocar la ilusión que lleva tu nombre.
Gracias por elegirme, elegirme para acompañarte, elegirme para caminar juntos por la vida, elegirme para sentir.
Gracias por respirar, andar, mirar, hablar, despertar, sonreír, escuchar.... gracias por existir.
Gracias y un millón de gracias por dejarme amarte.
Gracias
Otros usuarios han buscado:
- Cartas de amor
- Cartas de amor para mi novio
- cartas de amor cortas
- cartas de amor originales
- cartas de amor romanticas
- cartas de amor para dedicar
- imagenes de cartas de amor
- las mejores cartas de amor
- frases de amor
- poemas de amor